Sócrates solía decir que el secreto del cambio está en enfocar toda tu energía, no en tu lucha contra lo viejo, sino en la construcción de lo nuevo. Y aquí es donde, tal vez, el concepto gestor de cambio juego un papel crucial, porque toda transición requiere de un buen capitán que se apropie de la ruta y la lleve hacia buen puerto.
Precisamente de este tema hablaremos a lo largo de este artículo, ya que un gestor de cambio se está volviendo una pieza clave para las empresas y hoy se hace importante reforzar el concepto, porque todos los profesionales deberían tener las aptitudes y una visión hacia el cambio. De allí, su necesidad de adquirir ciertos conocimientos, además de habilidades como la empatía, la resiliencia y el autocontrol; dignas de un profesional que quiere pasar de observador a actor para aportar soluciones a las grandes coyunturas del mundo actual.
El Doctorado en Administración de Empresas, de la Universidad de Investigación e Innovación de México (UIIX) se encuentra en línea prospectiva del profesional del 2030 reforzando en sus participantes las habilidades emergentes como: el pensamiento crítico, la creatividad, la planificación desde la incertidumbre, conciencia cultural; aptitudes fundamentales para que el profesional marque la diferencia en todos sus proyectos futuros.
¿Qué es ser un gestor de cambio?
En la vida, ya sea personal o laboral, no se trata solo de hacer un determinado cambio, sino de adaptarse a él y saber cómo gestionarlo. El logro de estos dos últimos puntos más que en un reto, se ha convertido en una habilidad que se alcanza mediante cualidades como la empatía, la motivación y, por qué no decirlo, la perseverancia.
Por tal motivo, el puesto de gestor de cambio toma cada vez más fuerza dentro de las organizaciones, debido a que estas precisan líderes dispuestos a creer en la innovación como recurso inagotable, que se preocupen y ocupen de los problemas sociales y ambientales y, sobre todo, que tengan ganas de construir futuro.
De manera que, un gestor de cambio vendría siendo un guía o gerente que se encarga de organizar las acciones de cambio, pero a su vez, quien se implica en la instrucción del recurso humano y trabaja de su mano para crear un proceso transformador.
Para realizar esta tarea de la mejor manera posible, un gestor de cambio debe contar con las siguientes características:
- Tener un sólido nivel de comprensión y de escucha activa.
- Poseer visión de futuro y ser organizado.
- Habilidades para la comunicación escrita y verbal.
- Practicar la resiliencia y la perseverancia.
- Capacidad para establecer relaciones.
- Debe ser capaz de actuar con flexibilidad y de adaptarse a todo tipo de situaciones.
- Suficiencia para persuadir e influir en los demás y hacer que vayan hacia un objetivo conjunto.
Entonces, ¿Cuáles son las funciones de un gestor de cambio?
- Analizar la situación que se está desenvolviendo y visionarla en función del cambio.
- Detectar los vacíos de aprendizajes y gestionar la formación de los mismos.
- Proponer el plan de acción y la estrategia de cambio.
- Establecer comunicación directa con los trabajadores implicados.
- Implementar el plan de acción.
El papel del gestor de cambio en el mundo
El mundo actual atraviesa una larga lista de efectos y coyunturas que pasan por el calentamiento global, la tan sonada y persistente pandemia, la pobreza, la corrupción, los conflictos entre naciones y unas cuantas más que nos deja el pasado y que piden a gritos una intervención rápida y eficaz. A lo anterior se debe agregar los cambios exponenciales del planeta que nos trae la tecnología digital, las nuevas tribus urbanas, la robotización que nos resulta tan difícil de digerir por su “aceleración”.
Aunque para sacarla adelante los anteriores efectos se requiere de muchos años y un sinnúmero de actores dispuestos a aportar un grano de arena a la solución, desde pequeños nichos se puede empezar a marcar la diferencia gestando un cambio profundo para comenzar a “aprender a desaprender los formatos del pasado para reaprender los caminos del futuro”.
Para no ir muy lejos, están las empresas, quienes, a través de sus departamentos de Responsabilidad Social Corporativa, se pueden poner la camiseta por el medioambiente, por ejemplo o, incluso, crear campañas internas en pro de salvaguardar la vida y el bienestar de quienes los rodean.
Es aquí cuando los gestores de cambio se convierten en especialistas de la construcción de un mejor futuro a partir de la innovación y creatividad en la gestión y el pensamiento exponencial; donde se pueda garantizar un desarrollo inclusivo y responsable en todos los niveles no solo de la compañía, sino del entorno en general.
Como sabemos que adaptarse a los cambios no es una tarea fácil, a continuación te damos algunas pautas para que ese camino sea mucho más llevadero.
Pasos para adaptarse al cambio
En su libro Liderando el cambio, John Kotter, profesor de la Harvard Business School, asegura que para que se dé un cambio exitoso, los altos mandos de las empresas tienen que desear salir del ecosistema para que ese cambio se produzca.
De acuerdo a esta teoría, creó ocho pasos para adaptarse al cambio:
- Delimitar un camino a seguir
- Generar el sentido de la urgencia
- Eliminar las barreras de los obstáculos
- Formar alianzas entre los líderes de la empresa
- Garantizar el cumplimiento de objetivos a corto plazo
- Incitar a una comunicación efectiva
- Construir sobre el proceso
- Consolidar el cambio y hacerlo parte de la cultura empresarial
Las 5 habilidades claves para enfrentar los cambios de las empresas
Ya habíamos dicho que un gestor del cambio que sabe brillar es un líder nato capaz de usar la comunicación como una herramienta de influencia y persuasión a favor de llevar a feliz término los procesos de transición que se estén ejecutando en la empresa.
No obstante, se hace vital que cuente con otras destrezas que lo hagan un gerente exitoso. Abajo te contamos cuáles son.
1. Habilidades para tomar decisiones y resolver conflictos
El clima laboral es uno de los aspectos que más se deben de cuidar en los procesos de cambio. Por esa razón, es de gran relevancia saber anticiparse a los posibles conflictos y a la resistencia que producen los cambios.
2. Aptitudes para la negociación
Un gestor del cambio que sabe transmitir sus ideas y, además, está dotado de una inteligencia emocional sólida; es un líder que motiva y contribuye a crear un mundo de hacedores.
3. Saber repartir las tareas
Delegar no es una tarea que se le dé con facilidad a los directivos. Sin embargo, vale la pena que sepan identificar sus fortalezas con el fin de centrarse en las funciones para las que son buenos y dejar en manos de otros las no pueden realizar.
4. Gestión de los recursos disponibles
Una buena administración de los recursos disponibles ayuda a tener una mirada global de hacia dónde se dirige cada proyecto y también ofrece una panorámica del negocio como tal.
5. Una marcada línea creativa
La creatividad es fundamental para pensar out the box y saber cómo sacarle provecho a los recursos disponibles y lograr soluciones innovadoras a las situaciones estancadas.
Si estás en busca de nuevos retos conviértete en especialista en gestión del cambio en la Universidad de Investigación e Innovación de México. Su Doctorado en Administración de Empresas es una opción excepcional.
¡Atrévete a ser parte de aquellos que tienen la mente en el futuro y los pies en el presente!