Competencias del siglo XXI ¿Estamos preparados para aprender?

Hoy en día la gran mayoría de las personas recomienda salir de la zona de comodidad y adoptar nuevas habilidades y conocimientos para adaptarse exitosamente al futuro de las profesiones, ¡Lo que está perfecto!, y estamos de acuerdo que es absolutamente necesario. Pero, ¿Somos realmente capaces de adoptar estas competencias del siglo XXI?, ¿Estamos preparados para aprender? 

Por momentos parecemos tener más preguntas que respuestas. Así que conozcamos las respuestas a estas y otras interrogantes.

En primera instancia, es fundamental conocer las habilidades básicas que debemos adoptar para realizar verdaderos aportes a un mundo en constante evolución. Algunas de ellas son:

Alfabetización digital

No, no son ideas tuyas que hoy todo parece estar digitalizado, incluso la alfabetización. Pero no te preocupes, que esto no tiene por qué ser algo malo. 

La alfabetización digital se ha convertido en una competencia esencial. Puesto que implica la capacidad de utilizar las tecnologías de la información y la comunicación de manera efectiva y responsable. 

Desde el manejo de herramientas y plataformas digitales hasta el pensamiento crítico en línea, esta proporciona a los estudiantes las habilidades necesarias para navegar y prosperar en el entorno digital actual. ¡Y tú puedes formar parte de eso!

Pensamiento crítico y resolución de problemas

Por otro lado, debemos ser capaces de analizar y evaluar la información de manera objetiva y reflexiva. Potenciando cada vez más nuestra capacidad de resolver problemas creativa y eficientemente.

Recuerda que estas competencias permiten abordar desafíos complejos, tomar decisiones informadas y desarrollar soluciones innovadoras. Por lo que te recomendamos fomentar el pensamiento crítico y la resolución de problemas en el currículo educativo, para enfrentar los desafíos del siglo XXI con confianza.

Creatividad

La creatividad también se ha vuelto cada vez más valorada en el siglo XXI, ya que implica la capacidad de generar ideas originales, pensar de manera innovadora y adaptarse a situaciones cambiantes. 

Por ello, fomentar es lo mismo que promover la curiosidad, el pensamiento lateral y la capacidad de encontrar soluciones únicas. Podrás empoderarte y aumentar la confianza en tu persona, para ser un verdadero agente de cambio y generador de nuevas ideas.

Comunicación efectiva

Por supuesto, también es indispensable que te expreses de manera clara, persuasiva y adecuada en diferentes contextos y medios. 

Desde la comunicación verbal hasta la comunicación escrita y digital, esta competencia te permitirá transmitir tus ideas de manera efectiva, colaborar con otros y construir relaciones sólidas. Por ello, el desarrollo de habilidades de comunicación efectiva debería ser una prioridad en el currículo educativo.

Colaboración

Si relacionas el trabajo en equipo con estrés, frustración y sufrimiento en general, entonces te conviene aprender a colaborar. Debes ser capaz de trabajar de manera efectiva y armoniosa con otras personas, respetar la diversidad de opiniones y contribuir al logro de metas comunes. Así, podrás promover el aprendizaje social y emocional, así como preparar a otras personas para el mundo laboral.

Ciudadanía global

Hablando de ciudadanía, esta implica una comprensión de los desafíos globales y una responsabilidad hacia el bienestar colectivo. Se trata de tomar conciencia de cuestiones sociales, culturales y ambientales, así como de tener la voluntad de tomar acciones positivas para abordarlos. 

En pocas palabras, adoptarás una mentalidad global, apreciarás la diversidad y participarás de manera activa en la construcción de un mundo más justo y sostenible.

Todo esto suena maravilloso, pero ¿Qué necesitamos para adoptar la posición del eterno estudiante?

Curiosidad

En primer lugar, la curiosidad es el motor del aprendizaje, ya que implica tener un deseo genuino de explorar, descubrir y comprender el mundo que nos rodea. Permitiéndote mantenerte en constante búsqueda de conocimiento y crecimiento.

Autodisciplina

Igualmente, es crucial adoptar la autodisciplina como parte de tu día a día. Debes establecer metas, mantenerte enfocado y seguir adelante incluso cuando el camino se vuelve desafiante. Para ello, puedes crear rutinas de estudio, administrar el tiempo de manera efectiva y mantener la motivación intrínseca para perseguir objetivos de aprendizaje a largo plazo.

Flexibilidad y adaptabilidad

El mundo está en constante cambio, y un eterno estudiante debe ser capaz de adaptarse a nuevas circunstancias y desafíos. Esto implica estar dispuesto a abandonar viejas ideas y formas de hacer las cosas, estar abierto a nuevas perspectivas y abrazar el aprendizaje en contextos cambiantes. La flexibilidad nos permite aprovechar las oportunidades de aprendizaje que surgen a lo largo de la vida.

Mentalidad de crecimiento

Por supuesto, debes tener más que un objetivo o meta para hacer todo esto. Concretamente, una mentalidad de crecimiento es esencial para adoptar la posición del eterno estudiante. Esto implica creer que nuestras habilidades y capacidades pueden desarrollarse a lo largo del tiempo mediante el esfuerzo, la práctica y la perseverancia. De esta forma, podrás asumir desafíos, aprender de los errores y seguir mejorando continuamente.

Apertura a nuevas experiencias

Si te estás preparando para el cambio, lógicamente debes estar abierto a él. Lo que puede implicar explorar diferentes campos de conocimiento, participar en actividades fuera de nuestra zona de confort y buscar nuevos entornos y perspectivas. Al abrirnos a nuevas experiencias, ampliamos nuestra visión del mundo y enriquecemos nuestra trayectoria de aprendizaje.

En la Universidad de Investigación e Innovación de México somos conscientes de esto. Por ello, ofrecemos nuestro Doctorado en Educación e Innovación, que surge como respuesta a la necesidad presente de formar docentes investigadores de alto nivel en el área de la educación, con conocimientos, habilidades y actitudes capaces de desarrollar e innovar procesos pedagógicos. 

Buscamos generar bases de conocimiento práctico en materia de enseñanza, aprendizaje, evaluación, calidad educativa, administración educativa, tecnología educativa y docencia, así como soluciones aplicables a la realidad educativa globalizada en todos los niveles educativos y en beneficio de la sociedad.

Sencillamente, porque sabemos que el mundo actual demanda competencias más allá de las habilidades académicas tradicionales.

¡Solicita informes!

Artículos Recientes

Artículos Relacionados